Unas 2.000 edificaciones residenciales ya han sido examinadas para que cumplan con las medidas de seguridad, conservación y eficiencia energética.
La inspección técnica de los edificios de viviendas es una inspección visual que tiene por objeto determinar el estado del edificio en el momento de la inspección y orientar a la propiedad en las actuaciones a realizar para cumplir el deber de conservación, mantenimiento y rehabilitación.
La ITE es obligatoria en edificios de 50 años o más de antigüedad. Esto es así porque está demostrado que es un momento a partir del cual es más probable que el edificio haya sufrido daños que pongan en peligro a las personas que viven en él. Después, debe pasar la inspección una vez cada 10 años.
No cumplir los plazos estipulados para la presentación de la ITE puede conllevar sanciones. Cuando un edificio no pasa la ITE las sanciones que dependerán de las ordenanzas municipales de cada Ayuntamiento, pero que podrían llegar a los 6000€, según consecutivas multas coercitivas de 1000, 2000 y 3000€.